Las redes sociales han transformado la forma en que las marcas hacen publicidad. Mientras la televisión y la radio siguen en caída, el consumo digital sigue creciendo año tras año.
Cuando empecé a estudiar publicidad (2007-2008), las celebridades eran la cara de las grandes marcas. Se creía que los consumidores aspiraban a ser como ellos, pero esa tendencia cambió completamente.
El primer indicio del cambio fue Fotolog.¿Se acuerdan de Cumbio? Fue un ícono flogger y se hizo famosa sin necesidad de medios tradicionales. Sin embargo, en ese momento, las marcas todavía no confiaban en figuras emergentes de internet para comunicar productos o servicios.
Con el tiempo, eso cambió con la llegada de los influencers.
Influencers en 2024: los nuevos protagonistas de la publicidad
Hoy, en 2024 (casi 2025), los influencers están completamente instalados en las estrategias de comunicación de las marcas.
¿Por qué las marcas los eligen sobre los publicistas tradicionales?
✔️ Son expertos en redes sociales.
✔️ Tienen comunidades construidas con engagement real.
✔️ Conocen los formatos y tendencias mejor que nadie.
✔️ Son creíbles y generan confianza en sus audiencias.
Mientras tanto, hay publicistas que aún no se han adaptado por completo a las plataformas digitales y siguen pensando en medios tradicionales.
¿Ser influencer es una nueva profesión?
Hoy en día, ser influencer ya no es solo hacer canjes. Se ha convertido en una profesión real que requiere:
- construir una marca personal,
- generar contenido constante,
- conocer a su audiencia,
- y entender cómo funciona el algoritmo.
Además, implica negociar con marcas, leer métricas, adaptarse a tendencias y tener una estrategia clara.Ser influencer no es (solo) posar para la foto. Es trabajar en serio para sostener una comunidad, generar impacto y monetizar desde lo que se comunica.
Porque sí: ser influencer es una profesión. Y como toda profesión, necesita formación, planificación y propósito.